Los siniestros más habituales en un PYME son: Reclamaciones derivadas por robo (23%), siniestros de responsabilidad civil (16%), siniestros motivados por causas climatológicas -viento, lluvia, granizo- (13%), siniestros derivados de incendio (13%), siniestros motivados por daños propios de agua (10%), y por último, reclamaciones derivadas por daños eléctricos– sobretensiones, cortocircuitos, etc…- (8%).
El Continente y el Contenido se aseguran a Valor de Nuevo, salvo las mercancías que se harán a coste de reposición y los objetos de valor especial a valor de mercado.
El infraseguro es la situación en la cual el valor de la suma asegurada es inferior al valor real del bien que se protege.
En esta situación, la cobertura contratada no alcanza a cubrir los bienes que el tomador desea proteger. Esto tiene dos importantes consecuencias: el precio de la prima es inferior al que debería ser, aunque ese ahorro no compensa, ya que la indemnización en un siniestro será también menor.